6 de febrero de 2014

Capítulo 2 Parte 6: Epílogo [2/2] Ayer.

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Epílogo de este capítulo:
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¿Qué sucede después del final?

~o~

6 de Jan (Junio).

Año 196 d.G.C. Un año antes.

Ciudad de Ener, Gobernación de Estrek.


"Recuerdo, hace más de un año, la última vez que lo vi"

"Fue en aquella noche en la que se celebraba una fiesta de nobles, miembros de las casas de Estrek..."

"...como cada año solía ser"

"Me encontraba en el balcón del palacio de Ener según recordaba"



"Parece que no te estás divirtiendo, hermana. Sabía que estarías aquí"-me dijo Pinto, mi hermano quién me había encontrado.

Tristana: Sí, nunca me interesaron estas fiestas de ricos y mucho menos la temática que ha elegido nuestro padre. ¿Cuál es el sentido de usar máscaras en eventos así?
Pinto: No lo sé, pero esta es mi oportunidad para hablar con las jóvenes doncellas que vienen de muy lejos.

Tristana miró seriamente a Pinto y murmuró:

Tristana: Si nuestro padre te viera...
Pinto: No me reconocerá con las máscaras, eso me da una buena ventaja-sonríe-.
Tristana: Algún día tendrás que conseguir una esposa y, en ese momento, madurarás de verdad, hermano.
Pinto: Tengo planeado no hacerlo, hermanita-sonríe-.
Tristana: ...

Pinto se había ido cuando Tristana quiso decir algo más. Se quedó en silencio durante un tiempo y decidió entrar al palacio. El balcón conectaba con las galerías del piso superior. Desde allí, vio el gran salón del piso inferior lleno de personas bailando en parejas al son de una melodía.

Tristana: Así que este es el nuevo baile que ese tal noble llamado Strorria trajo desde el oeste.
?: Es "Vals", mi Señora.

Tristana giró su cabeza hacia donde provenía la voz. Era un joven con una máscara dorada.

...Era un joven con una máscara dorada...
Tristana: Buenas noches, Corpus.
?: Vaya, me ha reconocido a pesar de que use máscara, mi Señora.
Tristana: Su voz es inconfundible, Raxl Corpus de la casa Kayda.
?: Prefiero que me llame Raxl, mi Señora.
Tristana: ¿Por tu primer nombre únicamente?
Raxl: Hemos pasado demasiado tiempo como compañeros de vida.
Tristana: Jamás me acostumbro a llamarle de otra manera, Corpus.
Raxl: Eso lo puedo comprender. ¿Me permite acompañarla en esta noche, mi Señora?
Tristana: -suspiro-Sí... quizás esté bien con su compañía.


Tristana volvió a ver el piso inferior con extrañeza.

Tristana: Ese "Vals" que ha traído ese Strorria, es un baile muy extraño. Todos parecen estar girando sin sentido. Incluso los instrumentos que trajo son bastante peculiares.
Raxl: Parece que no se está divirtiendo, mi Señora.
Tristana: ¿Por que no me extraña que dos personas me lo hayan dicho esta misma noche? No, sigo pensando en lo que sucede en la gobernación de Corpulia. Esta mañana se dio la noticia de que Anaarq ha empezado a sublevar la población.
Raxl: Parece que el rebelde busca una nueva oportunidad después de haber fallado en Terranova.
Tristana: Así es, y yo no estaría bailando junto con esos nobles mientras suceden estas cosas. Mira lo despreocupados que están. Como si ignoraran que más allá de este palacio hay rebelión y muerte.

Se hizo un silencio momentáneo. Raxl sonrió animado y dijo:

Raxl: A pesar de que nunca será la reina de Estrek, tiene bastante experiencia en gobernar.
Tristana: Mi madre siempre ha querido lo mejor para mí. Jamás le gustó las típicas mujercitas de la corte menos que yo me convirtiese en una así. Mi hermano Diori tendrá la corona y Pinto tendrá su encanto pero yo tengo conocimiento total de lo que pase en el reino.
Raxl: Debe de estar orgullosa su madre.
Tristana: Quizás, quizás.
Raxl: Todavía piensa en aquel día.
Tristana: Aquel día en que la perdí a ella y la visión de mi ojo para siempre.

Todo se hundió en un silencio mientras melodía tras melodía pasaba en la orquesta.

Tristana: ¿Crees que exista el destino, Corpus?
Raxl: ¿El destino?
Tristana: Sí, he oído historias acerca de que el destino es un final al que cada uno de nosotros nos tenemos que atener. Que todas nuestras acciones no cambiarán nada de él.

Corpus se quedó en silencio.

Raxl: No, no creo en el destino. Si todos estuviéramos condenados a sufrir de un destino, ¿qué es la vida sino una historia que nos la han contado desde el principio?

En aquel momento una voz femenina desde la oscura galería se alzó.

...De las sombras emergió la figura de una persona...
Voz misteriosa: ¿Pero cómo sabes si la vida está atenida al destino o al libre albedrío si nunca la has vivido hasta el final? Esa es la gran pregunta.
Raxl: ¿Quién es? Muéstrate.

De las sombras emergió la figura de una persona. Usaba una máscara de doctor y un sombrero. Su torso y el resto de su cuerpo estaba cubierto por un abrigo de gabardina de cuero. Utilizaba también unas botas grandes.

Figura misteriosa: Nadie sabe con certeza si es el destino o es el libre albedrío lo que justifica la acción.
Raxl: ¿Qué sabes tú entonces?
Figura misteriosa: Más que nadie. El destino y la libertad son meras justificaciones de la acción. ¿Por qué preocuparse por ello?
Raxl: ¿Quién eres? ¿Un noble? ¿O un ladrón?
Figura misteriosa: Ninguna de las dos. No soy el despreocupado noble que le importa su propio ego ni el famoso ladrón que roba el pan para los pobres.
Raxl: ¿Entonces?
Figura misteriosa: Digamos que soy un factor que cambia las cosas.
Tristana: ¿Y qué vienes a hacer dentro de un palacio? ¿Cómo has podido entrar?
Figura misteriosa: Poco importa, poco incumbe. Sin embargo, lo que vengo a decir es lo relevante.
Raxl: Entonces no me importará tampoco llamar a los guardias.
...Ojos que no eran normales,
ojos que daban miedo...
Tristana: Espera Corpus, dejemos que hable si promete que después se irá sin robar nada. Sin embargo deberá mostrar su rostro.
Figura misteriosa: Vaya, al parecer eres más astuta de lo que yo estaba pensando. No estoy en condiciones de mostrar mi rostro ante personas pero parece que no tengo opción, ¿no?
Raxl: No, ahora muéstrate.
Figura misteriosa: Es una pena...

La figura se quitó lentamente el sombrero y lo dejó caerse al piso. Luego, se desabrochó la máscara de doctor a la misma velocidad. Se la quitó y esta cayó al suelo también mostrando sus cabellos negros y largos. Sin embargo, la figura se encontraba tan cerca de la oscuridad que no se podía distinguir su rostro. De pronto, sus ojos empezaron a brillar en un rojo tan intenso que se asemejaba con la misma sangre. Ojos que no eran normales, ojos que daban miedo. Tristana sintió ese miedo mientras seguía observando aquellos ojos. El tiempo empezaba a pasar lentamente.

~o~

Lady Tristana se levantó desesperada de su cama. Su respiración parecía muy desesperada. Había tenido una pesadilla al parecer. En ese momento, sintió una opresión en el pecho. Empezó a respirar lentamente para tranquilizarse. Lo único que recordaba eran esos ojos. Había olvidado por completo de dónde los había visto. Se recostó y miró el techo de la habitación. Estaba en una habitación de la Basílica de Dalas según podía ver. Se sentía tan cansada a pesar de haber dormido por mucho tiempo. Sin embargo, una fuerte puntada de dolor en su ojo derecho empezó a molestarle. Cuando quiso tocar su parche, notó que no estaba allí tapando su ojo. En vez de eso, se hallaban varias vendas que cubrían su ojo. Algo confundida, se preguntó a sí misma:

Tristana: ¿Qué me ha pasado?
Voz: Eso te lo puedo responder ahora.

Tristana se giró la cabeza hacia donde se originaba la voz.

Voz: Tranquila, soy yo, Gongora.
Tristana: ¿Gongora? ¿Qué ha pasado?
Gongora: Bueno, parece que no has recordado lo que sucedió. Cuando estabas saliendo de la sala de reuniones, te desmayaste. Un guardia te encontró y después te pusimos en esta cama para que descansaras.
Tristana: ¿Cuánto tiempo estuve así?
Gongora: Casi todo un día.
Tristana: Así que me he perdido la sesión de La Junta de la Paz.
Gongora: No, hemos tenido que cancelarla.
Tristana: ¿Por este percance? No es importante un miembro más o un miembro menos, ¿no?
Gongora: No, no es eso, algo peor ha pasado.
Tristana: ¿Qué?
Gongora: Hemos recibido varias noticias. Anoche, el representante de Bagres, Ereo Trinare murió a causa de una fiebre. Por eso hemos cancelado la sesión.
Tristana: Mis pésames.
Gongora: En segundo lugar, el hermano del representante del Rey en Archipiélago, Decio Lux, murió hace unos días. Por ende, tuvo que retirarse ha hacer luto. Después, Raxl Corpus fue llamado por el Rey a una reunión en Jonovia. Es por eso que debido a que somos pocos miembros tuvimos que cancelar totalmente esta reunión.
Tristana: Ya veo.
Gongora: Sin embargo, tengo graves... graves noticias acerca de su familia en Estrek. Es la verdadera razón por la que hemos pospuesto La Junta de la Paz hasta el próximo año.
Tristana: ¿Qué ha pasado?
Gongora: Ría Tirián de la casa Tritión, el día 25 de Hera (Julio) en Inae, durante la fiesta de los nobles, exterminó a todas las casas de Estrek.
Tristana: ¿Qué? ¡¿Los Tirián de Tritión?! ¿Cómo ha pasado esto?
Gongora: Envenenamiento según he podido saber.
Tristana: Pero, mi familia pocas veces van a esos eventos. Son solo de nobles.

Gongora negó con la cabeza.

Gongora: Su hermano, Pinto Ener, fue allí junto con su consejero Teodoro.

Tristana se tapó la boca con las manos.

Tristana: No es cierto... No puede ser... que haya muerto...
Gongora: Según las noticias que hemos recibido, podemos confirmar que su consejero ya ha fallecido pero el paradero de su hermano es desconocido. Nadie ha encontrado su cuerpo.
Tristana: Hubo... ¿Hubo algún sobreviviente?
Gongora: Sí, solo un noble. Racus Faraday de la casa Gerey.

Tristana se levantó de su lugar de descanso.

Tristana: Gongora, haz que envíen este mensaje al Rey. Diles que Tristana Ener, de la casa Real se ausentará de su cargo de representante del Rey en Hostalia por motivos personales durante un tiempo... indeterminado.
Gongora: ¿Por luto?
Tristana: A los vivos no se les hace luto. Si no han encontrado el cuerpo de mi hermano, significa que algo ha sucedido. Por cierto, ¿quién me ha puesto estas vendas?
Gongora: Un médico. Solo lo hizo para que nadie viese tu ojo.
Tristana: ¿Alguien más ha visto mi ojo?
Gongora: Solo el guardia y él. ¿Por qué?
Tristana: Nada.
Gongora: Ah, me olvidaba, aquí está tu parche. Lo encontré en una de las galerías. Me tengo que retirar por ahora. Le he dicho a su servidumbre que se reúna aquí dentro de poco.
Tristana: Gracias Gongora.
Gongora: No hace falta las gracias, Lady Tristana.

Gongora salió de la habitación. Ya estaba empezando a oscurecer. El ambiente se volvía más oscuro conforme la noche avanzaba. El hombre caminó por las galerías mientras las estrellas aparecían una a una. Gongora escuchó la voz de un hombre detrás suyo.

Voz misteriosa: ¿No son hermosas las estrellas desde aquí?
Gongora: Todo depende de dónde y cómo las veas. A veces son el último consuelo de los hombres antes de morir. Otras veces son solo un adorno. Apreciarlas o no está a nuestra elección. Pero aun así, siempre miramos de vez en cuando el firmamento.
Voz misteriosa: Así que, ¿cómo te fue con Tristana?
Gongora: Bien, al parecer ha olvidado todo acerca de mí y del plan de "Ella". Ahora se dirigirá a Estrek.
Ojos que no eran normales,
ojos que proyectaban algo peor
Voz misteriosa: Brillante, Gongora. Has demostrado ser un servidor fiel. Pero, ya sabes que tú no tienes un destino... propicio y no puedes cambiarlo.
Gongora: Lo sé... pero quiero contribuir con ustedes antes de eso-sonríe-.
Voz misteriosa: La verdad no entiendo a los de tu clase. Cada uno tiene sus razones y motivos pero tú nunca dudas de nosotros.
Gongora: Simple intuición eso creo. ¿Qué sigue después?
Voz misteriosa: Por ahora tendrás que mantenerte al margen de la situación. Puede que Tristana haya olvidado que tú estabas en el plan pero con el tiempo puede recordarte.
Gongora: Bien, esperaré hasta que lleguen nuevas órdenes. Sabia decisión como siempre, consejero.
Voz misteriosa: No me llames consejero, Gongora. Corpus no está aquí y me ha olvidado también.

De donde provenía la voz, brillaron unos ojos dorados. Ojos que no eran normales, ojos que proyectaban algo peor.

~o~

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